En una apuesta pionera por un nuevo modelo de integración social e intercambio de experiencias, se ha puesto en marcha en Ourense un centro intergeneracional que albergará a niños y mayores. Financiado por la Fundación Amancio Ortega, este espacio contará, por un lado, con un centro de día con capacidad para 80 usuarios y varias salas de reunión, televisión y gimnasia. Y, por otro, con una escuela infantil con 82 plazas para niños de 0 a 3 años. El edificio, dividido en dos alas y con patio interior, ha costado más de siete millones de euros.
Esta infraestructura fue presentada ayer en Ourense en un acto al que acudió el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo; el consejero de Política Social, José Manuel Rey Varela; el director y la vicepresidenta de la Fundación Amancio Ortega, Óscar Ortega y Flora Pérez Marcote; así como el alcalde de Ourense, Jesús Vázquez.
En este escenario, el máximo mandatario autonómico destacó el «compromiso» del Gobierno gallego con el «envejecimiento activo» y la infancia. Además, quiso agradecer a la Fundación Amancio Ortega la puesta en marcha de «uno de los mejores centros de España y Europa», que nace con el objetivo de convertirse en punto de «intercambio de experiencias» entre los mayores y los que inician la vida. Asimismo, rescató el «recuerdo del primer maestro» y especialmente de los «abuelos», que eran los encargados de transmitir a los más pequeños los valores de la sociedad, y confió en que el nuevo centro coja el testigo como punto de encuentro entre generaciones a través de «un contacto que será bueno para ambos».
El presidente gallego destacó que en su apuesta por la atención a los mayores, además de estas 80 nuevas plazas, desde 2009 se han multiplicado por tres los recursos económicos para este colectivo, pasando de 126 a 414 millones de euros en 2018.
Además, quiso recordar que las 82 plazas para niños de 0 a 3 años de este Centro Intergeneracional de Ourense contribuirán a que Galicia supere el curso que viene el umbral de las 24.000 plazas en colegios públicos, lo que supone una ratio de cobertura del 41,3%, 10 puntos por encima del óptimo considerado por la Unión Europea.